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La plaga de la mosca blanca

Publicado: 2013-02-12

La plaga de la mosca blanca sobre los jardines de Fujimori, en la prisión de Fundo Barbadillo, es un must que todo amante de la entomología domina en sus cinco dedos de frente. Nosotros, humildes amantes de las flores de león de la vecina, no pasamos de los claveles, o el nombre de las avenidas a la final de Javier Prado con Jesús María.

La plaga de la mosca es el terror homóptero de cualquier cultivador vegetal: invade las plantas hasta destruirlas, por eso son consideradas como plagas para la agricultura. Pietà, plis, es sintomático que el Ex Presidente utilice caldo de ajo y hasta insecticida raid, cuidado con el suicidio – seguramente facilitado por una voraz congresista que arrasa con estos bichitos en sus horas más calatas.

Contra esos puntitos blancos que trae abajo sus “hijitos”, en su amplia celda; es natural que Mr. Fujimori se levante febril de la cama para aliviar esa preocupación, en realidad a un  girasol lo ve con cara de Kenji, por el cacharro redondo ingenuo; una rosa es Satomi, pero morada y se deshoja; Keiko es su planta mayor, la esperanza: La Flor de lis; y Susana Higuchi sería mala hierba para él, terribles recuerdos mediáticos, eléctricos

¿Fue la plaga de la mosca un vaticinio de su enfermedad ? por lo menos, es la gran metáfora de lo que pasa en la batalla por el indulto presidencial, van perdiendo… La Mosca es la Justicia: Como los ángeles en Neon Genesis Evangelion, la famosa serie de Hideaki Anno (1995), vienen a redimirnos de las plantaciones, políticas, de los fujimoristas.

Esta plaga es de importancia mundial. Las moscas blancas son cercanas a las chicharritas y pulgones, de su mismo orden que para el caso serían los nacionalistas, que los tienen castigados en la esquina para no facilitarles el indulto. Tener a la plaga de lejos, o tenerla cerca y que infeste todo, ahí tu respuesta, difícil para Aguinaga, lástima que no sea médico con especialización en los insectos o mejor dicho, quizá sea fácil intercambiar pareceres y el médico se confunda y lo piense dos veces antes de rechazar la Junta Médica.

Y no tanto estamos lejos de la realidad: las moscas machos viven menos que las hembras, algo así como Martha Chávez, la indestructible, que junto con la Luz Salgado son duras de matar ante cualquier ácido – las arañas de hierro en la tela de Mr. Fujimori. Ojo: las moscas blancas dejan sus huevos sobre las hojas, y da la casualidad que las mismas hojas alimentan a los huevos de las moscas, fortaleciéndolos  para su propia destrucción, qué alucinante. Pero la plaga de la mosca arrasa con todos: destartala las neuronas de Isaac Humala cuando dice que Alexis Humala es un posible candidato al partido nacionalista; más con la osadía de preguntarle, el vástago, a una reportera de Panorama ante la entrevista: ¿Es para algo bueno o para algo malo? plop, no, pavo, es para un arreglo floral… Los fujimoristas han quedado muy mal después de este video donde aparece el ex mandatario haciendo bromas de su enfermedad, más preocupado en la salud de sus plantaciones.

Sin duda, la plaga de la mosca nos agarra a todos: los que creyeron en el indulto; lo que no; y además el oficialismo, que con sus tenazas de mantis religiosa tiene contra la pared a sus adversarios por excelencia, en las contiendas para saber quién gobierna al Perú en el 2016. Ey, Comandante, ojo al piojo. Baygon a forro.


Escrito por

Luis Torres Montero.

Periodista. Columnista y escritor. Videorreportero. Comprometido con la libertad de prensa, el arte, y los derechos humanos.


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