Telefónica tiene más arrugas que Shar-Pei y la hizo lindísima. Estuvo encantadora: moviórabo durante seis meses y el Gobierno pasó por alto sus 3.000 millones de soles endeudas a la Sunat y ¡Zum! Se le renovó el contrato tantos años como para sacar el DNI, osea lo premió, es decir el ente rector dio el ejemplo a las demás empresas deudoras:“Debe mucho y te recompensaremos”. Ni la U, ni el Alianza Lima se la creen y hastaGlobal TV podría burlarse de su competencia (Claro) al no saber aprovechar la ocasión.Tampoco se la creen, las miles de empresas peruanas que se matan trabajando parallegar a pagar sus impuestos, para quedar con una excelente imagen y de paso acceder abeneficios tributarios. Naaa, nada de eso existe en little Perú, el país que se acuerda dellibre mercado cuando la empresa favorita está fuera del negocio lobista. Y han salidotodos a defender el pagaré: El Comercio celebró con vitrina al embajador español enPerú, repicando cátedra de neutralidad cuando la factura se pasa por caja de publicidad(chúpate esa rima) – Perú 21 fue más sincero: no lo puso como publicherri sino le dio unadiagramación publicitaria de dos páginas, más portada, claro está. Sin nombrar otrosdiarios vedettes de dicha telefonía. Sigamos. No, no le importó al Gobierno nada, sólo lanegociación a puerta cerrada y el tiempo se volvió en nuevos soles para sacar unbeneficio mayor, más allá de todo respeto a la competencia, que ni siquiera se diooportunidad para saber si el país podía sacar un provecho mayor. Yo me he puesto enguardia. También mis causitas que pululan en Infocorp. Quieren todos ellos que lospremien por sacarle la vuelta al Perú, pues no pasa nada con la decencia, que el Perú esel país de las oportunidades, caracho, y de la cocina y ritmos inmobiliarios, también de losextranjeros que les gusta meternos el dedito cuando de abusivos se trata. En realidad,quiero entender por qué tanta corona a la divina Telefónica, porque los súbditos ya hanfirmado con nombres y apellidos y nuestros gobernantes juegan en contra de losintereses de todos los peruanos, empezando por sus bonzos. Las tarifas de Internet soncaras y el resto de población emprendedora que los paga, no, no importa. La inclusiónsocial tecnológica no los contiene. Lo que nos sacan por sus malos servicios es sobreganancia plena, cada céntimo, cada minuto de pago, en más de los 30 millones deperuanos hechos cojudos por sus autoridades ¡choprove con el chicharrón! a diferenciade lo que pueden hacer con Cuna Más, o todos los programas sociales del Gobierno, lebasta recaudar lo de la otra mayoría para sumar en su negocio. Contranatura, no se tomóen cuenta su rala fibra óptica en el largo y el ancho del territorio, el Ejecutivo le cree. Paranada vale su pésimo servicio, el Gobierno apoya y cuida su Shar-Pei. Frente a la empresaextranjera, hacerse respetar es algo que no conoce el Ejecutivo. Telefónica se queda,pasa nuevamente por el lado bicolor, levanta la pierna…calienta con la lluvia dorada sustexturas.

pd: ¿ya vieron la multa que le puso Europa a Telefónica?